Mecánica

Cinco partes costosas para reemplazar y cómo cuidarlas

28 de agosto de 2023
Por: Ana Gabriela Oquendo

Todo vehículo experimenta daños en algún momento de su vida útil. Sin embargo, hay ciertas piezas que merecen especial atención al ser las más costosas al sustituirlas. En el caso del mercado ecuatoriano, en el top 5 están la unidad de control de motor, el kit de reparación básica de motor, la caja de cambios, el diferencial y el turbo, según un estudio realizado por Teojama Comercial.

Su costo promedio es de:

- ECU de motor (unidad de control): $ 1.800 (liviano) y $ 3.700 (pesado)

- Kit de reparación básica de motor: $ 1.700 (liviano) y $ 3.600 (pesado)

- Reparación caja de cambios: $ 1.500 (liviano) y $ 8.000 (pesado)

- Reparación diferencial: $ 1.200 (liviano) y $ 2.900 (pesado)

- Turbo: $ 800 (liviano) y $ 2.600 (pesado)

Obviamente, estos son valores referenciales y el precio final depende de la gravedad del daño, la marca de la pieza, el modelo y el tipo de repuesto, es decir, si es original o alterno.

Para evitar estos gastos, lo más recomendado siempre es el mantenimiento técnico preventivo.

● En el caso del motor, lo importante es evitar su sobrecalentamiento por falta de líquido en el sistema de enfriamiento, acelerar de manera progresiva y evitar que el auto se sobre revolucione.

● Para mantener el ECU de motor se debe evitar el contacto directo con agua o que el cableado esté en mal estado. Un cortocircuito o grietas en las placas de circuitos podrían hacer que falle la programación del computador.

● En el turbo es fundamental vigilar que la temperatura sea siempre la adecuada y que los aceites no sean de mala calidad.

● Para que la caja esté en buen estado lo aconsejable es no mantener presionado el embrague permanentemente, especialmente en cuestas, acelerar progresivamente e introducir suavemente las marchas, además de no reposar la mano sobre la palanca de cambio, pues provoca que las partes internas se desgasten prematuramente.

● Respecto del diferencial, algo fundamental es adoptar un manejo preventivo; es decir, reducir la velocidad o acelerar de forma suave.

Con estas recomendaciones, podrías extender el tiempo de vida útil de cada elemento del vehículo, así como ahorrar dinero en reparaciones y repuestos. Sin embargo, recuerda que hay factores que determinarán el tipo y velocidad del desgaste, como la forma de conducción, el estado de las vías, el cumplimiento de mantenimientos preventivos y la calidad de partes o líquidos que se coloquen en ellos.

Fuente: Teojama Comercial.