Cuenca camina hacia la electrificación de la movilidad

Mientras la movilidad limpia gana espacio en el Ecuador, ya hay ciudades en las que su promoción es parte del día a día. Cuenca es un ejemplo en este aspecto. El 9 de enero arrancó la última etapa de su proyecto de electromovilidad masiva: e-Cuenca. Este busca promover alternativas de movilidad, y sustituir los buses y taxis con sistemas de combustión, además de reducir los gases contaminantes hasta 2030.

El proyecto inició en 2020, cuando Transformative Urban Mobility Initiative (TUMI), un programa global de movilidad sostenible, eligió a Cuenca, en Ecuador, y Lviv, en Ucrania, para desarrollar pilotos de movilidad sostenible. Así se dio paso a la constitución del Plan de Electromovilidad, que involucra la generación de propuestas y más iniciativas, pero también la creación de políticas públicas que sustenten las acciones necesarias para la transformación.

Para que este se ponga en marcha, fue necesaria la coordinación de la Cooperación Alemana para el Desarrollo (GIZ) y la asesoría de Cities Forum, además del apoyo de instituciones gubernamentales, municipales, gremios de transporte, la academia, la empresa privada y la empresa eléctrica.

En ese camino también tuvo gran importancia la inauguración del tranvía, el impulso al sistema de bicicleta pública y la expansión de las ciclovías, así como la instauración de un sistema de pago y recaudación eficiente, pues los ciudadanos ya se familiarizaron con otras formas de movilidad. También hay entidades que ya han reemplazado paulatinamente su flota por vehículos eléctricos como la Empresa Municipal de Movilidad (EMOV) que compró 15 camionetas eléctricas para patrullaje.

Datos de la capital azuaya

En Cuenca circulan 150.000 vehículos, además del transporte público y comercial. Este produce cerca del 60% de las emisiones contaminantes de la ciudad.

Lo que sigue

Como parte de la siguiente etapa, se entregarán bicicletas eléctricas a instituciones como la Universidad del Azuay, por ejemplo. Al contar con un pequeño motor, estas facilitarán la subida en zonas empinadas de la ciudad. La academia también realiza investigación sobre temas vinculados a la electromovilidad.

Asimismo, se trabajará en la sustitución de la flota del transporte urbano y de taxis. Si bien la medida está amparada bajo disposiciones de la Ley de Eficiencia Energética, que establece la adquisición de buses eléctricos desde 2025, todavía es necesario trabajar con el sistema financiero, especialmente en cuestión de generación de créditos.

Además, el Plan de Electromovilidad trabajará en las políticas públicas y normativas para la regulación de otros medios de transporte -como los scooters-, en beneficios como parqueaderos exclusivos para quienes opten por la movilidad basada en energía limpia y en la infraestructura para el sistema de carga.